viernes, 14 de marzo de 2014

CÓMO ENSEÑAR A LOS NIÑOS A PEDIR PERDÓN..


Reconocer que tiene la culpa o que se siente arrepentido y necesita ser perdonado, es uno de los aprendizajes más difíciles tanto para quien enseña como para quien lo aprende. No se trata sólo de enseñar a los niños a pedir y a decir "perdón", sino que además, tengamos que enseñarles a sentir. Es una tarea difícil pero no imposible. Entre otras cosas, el pedir perdón enseña a los niños a reconocer sus errores, sus "meteduras de pata", y a ponerse en el lugar de la otra persona.




CÓMO ENSEÑAR A LOS NIÑOS A PEDIR PERDÓN

Pedir perdón es un acto de humildad, de reconocer un error y de demostrar a uno mismo que nadie, pero nadie es perfecto. Que todos, absolutamente todos, podemos equivocarnos, y que por lo tanto debemos asumir y ser responsables de nuestros actos. Se puede pedir perdón de distintas y variadas maneras, y no solo a través de palabras. Si tu hijo ha tenido un mal comportamiento o una mala actitud contigo, con su padre, hermanos, o con sus amigos,anímale a pedir perdón.

PAUTAS PARA QUE LOS NIÑOS PIDAN PERDÓN

A partir de los dos años, los niños pueden aprender que si pegan a otra persona ella posiblemente llorará y se sentirá triste. En este momento, se debe fomentar empatía mostrándoles qué es lo que siente una persona que fue "herida". Además de reprenderles, debemos animarlos a que de alguna forma "curen" esta "herida", haciendo con que su amigo se sienta mejor.

A partir de los 5 años, los niños ya poseen la capacidad de saber que su mal comportamiento ha resultado en una mala consecuencia. A esta edad, ellos ya entienden sobre lo que es correcto y lo que no, aunque eso no quiere decir que resulte más sencillo que aprendan a pedir disculpas. De este modo, debemos hacerles "recapacitar" sobre lo que hizo, reprenderles con paciencia y firmeza, y hablarles sobre la importancia de "arreglar" lo ocurrido, reconociendo que se ha equivocado y pidiendo disculpas, con un abrazo, ofreciendo un regalo al amiguito "lastimado", demostrando arrepentimiento, cambiando su forma de actuar para la próxima vez que lo encuentre, o simplemente diciéndole "perdón", "lo siento", "disculpas", etc.

El niño que aprende a pedir perdón, sea de la forma que sea, será un niño preparado para tener buenas relaciones personales. Los padres que saben pedir perdón a su hijo por lo que sea, son un buen ejemplo para los hijos.

EL DESAFÍO DE LOS NIÑOS DESOBEDIENTES HACIA SUS PADRES...

Hijos desobedientes

Los niños desobedientes tienen un temperamento fuerte, buscan el enfrentamiento, son desafiantes, miden continuamente las fuerzas y quieren ser el centro de atención. Lo malo es que con frecuencia lo consiguen; unas veces por agotamiento de los adultos y otras por perseverancia suya.

La mayoría de las veces los niños desobedientes están hechos “un lío”; no dejan de ser niños y como tales necesitan la seguridad que les podemos proporcionar los adultos. Pero un padre que duda continuamente cómo afrontar sus desafíos, cómo reaccionar ante sus desplantes, ante sus “oídos sordos”, no es el mejor ejemplo de seguridad y equilibrio. Ellos piensan que nosotros deberíamos saber siempre lo que tenemos que hacer, y no comprenden que dudemos tanto; a veces, sus actitudes son extremas, buscan la provocación ¡para ver si, por fin, reaccionamos y actuamos!

En estos casos, nos ayudarán mucho los Registros para anotar la conducta de los hijos desobedientes. Cuando no sepamos cómo reaccionar, cuando nos encontremos despistados, cansados... ¡anotemos exactamente lo que pasa en esos momentos!, pero para hacerlo de forma eficaz, utilizaremos el siguiente cuadro.

Hoja de registro de conducta en casa. NOMBRE__________________EDAD _________

Día y hora: Martes, 19.00 h. 

SITUACIÓN
¿Dónde estás, quiénes y qué haces?: 
Estamos los padres y Rafa en el salón, viendo la tele y le decimos:
“Rafa, ponte a hacer los deberes” 

CONDUCTA PROBLEMA
Qué hace o dice el niño:
(Sin levantar los ojos dice: ¡que me dejéis en paz!). 
(Ni contesta). 
Diez minutos más. 

Respuesta de los padres y otras personas presentes:
Ya está bien Rafa. Vete a hacer los deberes. 
Rafa, por favor vete ya.
¡Pero sólo 10 minutos!


Cuando le digamos algo y el niño no obedezca, lo primero apuntaremos el día y la hora que es; a continuación, tal y como lo hemos hecho en el ejemplo, escribiremos el resto. En este caso, el registro nos muestra cómo hemos hecho lo contrario de lo que deberíamos. Al final el niño ¡se ha salido con la suya! y nosotros hemos actuado incorrectamente, pues le hemos enseñado que contestando mal, no haciéndonos ni caso e imponiendo él las condiciones, nosotros terminamos cediendo. La siguiente vez hará algo parecido, pues le dio buen resultado.

¿Qué hacer con los niños desobedientes? Consejos prácticos

1. Poner unas normas claras a los niños desobedientes, que sepan qué ocurre cuando desobedecen. Ejemplo: las cosas las diremos sólo una vez y si no haces caso las consecuencias serán “éstas” (según sea el caso y la edad le llevarán a su cuarto para que recapacite, no le prestarán atención...)

2. Actuar inmediatamente sino obedece; no entréis en pelea. (En el caso anterior, apagar la televisión y llevarle a su cuarto a hacer los deberes).

3. No caer en las provocaciones de los hijos desobedientes. No contestar a sus quejas, directamente hacer lo que os habíais propuesto.

4. No intentar razonar con él cuando desobedece; es inútil, sólo intenta “liarnos y ganar tiempo”.